PENONOMÉ EN ABRIL 2020: MARIFELI DOMÍNGUEZ

Marifeli Domínguez

Repaso

La otra cocina
la de la casa vieja del molino
fea y lúgubre
amenazada siempre por la oscuridad
cobraba vida a la hora del desayuno
con el café y el maíz
y otra vez los granos cociéndose en lerda combustión.
Un hilo de amargura se acumulaba en el espacio.
Era quizás
la nostalgia por los naranjos en flor
o por el ciruelo
meciéndose al compás del viento
asomado en la ventana
de la casa de antes.
Quizás eran los olores añorados de la cocina de mi abuela
con sus mixturas de hierbas, frutas y raíces
o los sonidos del pollerín
o el silbido de mi abuelo.
Esa cocina sombría
tortura mi recuerdo
con una tos persistente
a través del tiempo.

Ellos

A la dulce Marcela

Mi recuerdo es el recuerdo de mis hermanos
y de Marcela
la que se acordaba de los giros del viento
en la temporada seca.
Esos recuerdos se agolpaban
se anudaban
se descosían
en la conversación vespertina
alrededor de mi madre
con una taza de café
y una risa ahogando remembranzas.

Tierra

A Francisca


Huele a tierra mojada en el jardín improvisado
de macetas corroídas por el tiempo y por la herrumbre.
Huele a albahaca, romero y ruda
a manzanilla en flor y a flores de naranjo.
Huele en ese huerto añorado de nuestra inocencia feliz
al otro lado del recuerdo y la ausencia
cuando mi madre marcaba el ritmo de las horas
con las meriendas o las comidas.
Huele a tierra de antaño
en el jardín de mi madre-abuela
ese que ya no es más.
Aquel que fue refugio y botica natural
para los males de la descendencia
remedios ancestrales a orillas del conocimiento y la razón.
Huele a jardín de manzanillas y rudas.

Casa vieja

A Tía Mara


Al margen del olvido
estos retazos de vida
cintas cortadas
telas en desafío con el instante.
Al margen del silencio
amaneceres sin luz
sin pájaros
sin infancia.
Una vieja casa
síntesis de un pasado quieto
olvidado del amor
alejado del amor.
Las grietas pobladas de malezas no dejan ir al amor.





Mariafeli Domínguez S. Escritora y Catedrática Universitaria. Hizo estudios de Filosofía, Letras y Educación y se especializó en lengua y literatura española. Obtuvo el Premio Literario Pablo Neruda en el año 1981, en la sección cuento, con la serie de relatos titulado Oquedades.  Posteriormente, en 1991, obtiene el Premio de Poesía Gustavo Batista Cedeño  con la obra Los presagios necesarios. En el año 2009, obtiene una mención de honor en el Concurso Nacional de Cuento, José María Sánchez con el libro de relatos titulado Parturiens y otros relatos.  Ha publicado, en 1995  un libro de ensayos titulado De la Literatura y otras complejidades, en las que ensaya una mirada a la literatura panameña.  Con la serie Cuadernos literarios de la Universidad de Panamá, publica el poemario titulado POEMAS, que recoge su primera producción. Su poemario, Los susurros de la casa, fue publicado por la Editorial Universitaria, en el año 1995. En 2012, sale a la luz el libro de ensayos Voces esenciales de la literatura panameña. Inéditos: Libro de poesías Incorporado a la fuga y Agenda para la añoranza. Coautora del libro Historia de Marruecos y Panamá a través de la voz poética de sus mujeres. (2017).  En prensa el libro, Marruecos es un telar de oro, con traducción al árabe y al francés,  Del recetario extraviado de mi madre, es el último libro publicado en 2020 Actualmente es la Presidenta de la Fundación Arte en el Parque y Directora de la Editorial Universitaria Carlos Manuel Gasteazoro de la Universidad de Panamá.